More Than This 1.8

Ahí estaba sentado en un banco de ese jardín inmenso. No estaba segura de lo que iba ha hacer pero me acerqué por atrás ya que vi que no estaba hablando y me senté a su lado en silencio. Estaba fumando.

Me miró, pero yo a él no.

-         Eso te está destrozando ¿sabes? –Dije con mi mirada perdida por el jardín. Me volvió a mirar y dio una calada al cigarro.

Se lo cogí y para su sorpresa le di yo otra calada. Otra vez me miró pero esta vez perplejo. Se quedó un buen rato mirándome, embobado, seguramente no se creería lo que estaba haciendo.

-         No deberías hacer eso.

-         ¿Tú si? –Dije.

-         Me relaja. –Seguía mirándome. Le di otra calada y lo tire.

-         Te mata. –Dije y le miré a los ojos.

Iba a responderme algo, pero se calló. Le quité la mirada.

-         ¿A que ha venido antes el numerito con Harry? –Cambió de tema bruscamente y además lo dijo bastante en seco. Su voz era áspera y parecía haberle puesto un tono despectivo al decir “Harry” ¿Le molestaba?

-         Ammm… -Sonreí.- Mis primos nos hablaron a Harry y a mí sobre nosotros, decían que haríamos buena pareja y bueno pensamos que sería divertido hacer eso, al menos para nosotros claro.

-         Y Niall. –Añadió dejando ver una pequeña sonrisa. Yo me reí un poco más. Su tono y humor había cambiado en cuestión de segundos.- En realidad hacéis buena pareja. –Dijo mirando a la nada. Me decepcionó. Se me hizo un nudo en la garganta cuando lo asimilé- ¿No hay nada entre vosotros? –Pareció que le costó hacer la pregunta. Me miró otra vez, pero yo a él no.

-         Somos buenos amigos. –Dije quizás demasiado seria, me había molestado el comentario de antes, pero supongo que lo pensaba así…

Nos quedamos un par de minutos callados, mirando a la nada.

-         Hace frío. –Dije levantándome.- Voy dentro.

-         Espera. –Dijo levantándose y quitándose la chaqueta. Me la ofreció y dijo no demasiado seguro.- Me gusta tu compañía.

Vaya, eso sí que no me lo esperaba. Mis mejillas se tornaron de un color rojizo, menos mal que era ya de noche y supuse que no lo pudo ver.

Vacilé un poco pero finalmente agarré la chaqueta y me la puse. Nos sentamos y volvimos a estar callados durante un par de minutos. Ahora creo que estábamos incluso más incómodos así que intenté suavizar el ambiente. Me giré hacia él y le pregunté:

-         ¿Por qué te importó tanto que estuviera en ese sitio el otro día? –Lo dije decidida, pero él bajo la cabeza. Me arrepentí de la pregunta.- Lo siento… no debería haberte preguntado eso. –Dije avergonzada.

-         Tranquila, supongo que algún día alguien tendrá que saber algo sobre mí. –Sonrió mirándome, pero sabía que no era una sonrisa verdadera. Suspiró.- Mi mejor amigo murió hace un año y medio.

Vale, en ese momento me sentí una idiota. Él siguió contándome.

Tenía un año más que yo, entonces 17. Un día por intentar hacerse el “guay” fue a una fiesta de los amigos de su hermano, no sabía de qué iba eso así que yo no quise ir con él. Lo único que sé es que mezclo drogas y alcohol. Un par de días después, uno de los chicos de la fiesta me dijo que se había pasado, que parecía sin control y que él pretendió pararle pero seguía y no hacía caso a nadie. Ese día no estábamos ni su hermano ni yo para ayudarle. Normalmente nadie muere por sobredosis, es posible salvarle, pero él tenía un pequeño problema en el corazón que hizo que en él si fuese mortal. –Calló durante unos segundos, tragó saliva y continuó.- Y respecto al sitio, a ese lugar suelo ir cuando necesito estar solo, casi siempre en momentos que él y yo pasábamos juntos. Me ayuda a pensar. –Paró de hablar. Me miró solo un segundo en el que pude ver su dolor, su sufrimiento y tristeza, demasiado fuerte como para seguir hablando de ello. Sus ojos estaban llorosos, sé que no se permitía llorar delante de mí y que

Sus ojos seguían tristes, se notaba bastante y entonces le dediqué una pequeña sonrisa.

-         Todo había cambiado en solo un par de horas. intentaba ser fuerte.

Apoyé mi mano en su hombro y dije:

-         ¿Sabes que no es tu culpa verdad? –Sé lo que se siente y al igual que yo él se culpaba de lo ocurrido.

Entonces bajó la cabeza y pude ver una lágrima deslizándose por su mejilla. Se la quité cuidadosamente con la mano y entonces el me miró. Ya no sentía para nada enfado, ni siquiera cenizas de el que había sentido hacía unas horas. Estaba cómoda, sentía que podía abrirme a él.

Su mirada se clavaba en la mía.

Me di cuenta de lo guapo que era, incluso más de lo que ya había pensado hasta ahora. Sus ojos oscuros misteriosos con esas largas pestañas que suavizaban sus masculinas facciones de la cara. Sus labios carnosos… Aclaré mi mente.

-         Deberíamos entrar. –Dije con voz dulce dándome cuenta de que Zayn estaba casi temblando y yo igual aunque llevase su chaqueta.

Me levanté quedándome en frente suya mirándole esperando una respuesta. Cogió aire y levantó la mirada encontrándola con la mía otra vez. Su mirada, era brillante, me perdía en esos ojos, seguía teniendo una mirada triste, pero ahora me miraba de forma diferente, nos conocíamos más.

Luego se levantó él, quedando a penas treinta centímetros en frente mía haciendo que mi respiración acelerase. Pero no me lo permití, me quité la chaqueta y se la dí mientras caminábamos de vuelta a la casa.

Cuando entré a la casa vi a Liam y Niall jugando con la play, Louis no estaba y Harry estaba tumbado en el sofá.

Necesitaba un poco de diversión después de esa charla así que fui corriendo hacia Harry y me tiré encima suya haciéndole gritar mientras yo me reía. Agarré un cojín y empecé a pegarle por todos lados, pero no tardó demasiado en conseguir quedarse encima mía ahora aplastándome él a mí. En ese momento entró Louis por la puerta y al vernos se tiró encima de Harry.

-         Tienes obsesión con mi primita ¿no? ¡Pues ya vas a ver lo que te va a costar eso! –Gritó ahora en broma y empezaron sus típicas peleas. Yo me quedé a un lado, en eso sí que no me iba a meter.

Miré hacia los demás, ahora Zayn estaba jugando con mi primo y Niall miraba atento.

Me alegró ver esa escena, Zayn estaba riendo con los chicos y parecía pasarlo bien.

Me senté al lado de Niall y empezamos ha hablar un poco sobre todo lo del sábado, veía que ya se habían enterado todos.

Un rato después cada uno volvimos a nuestras casas, como siempre yo en compañía de Liam.

-         ¿Ahora qué piensas sobre Zayn? –Dijo reprochándome lo que le había dicho hacía unas horas.

-         ¿Por qué das por hecho que he cambiado de opinión?

-         _____, os habéis tirado más de media hora hablando en el jardín. –Aclaró.- Así que reconoce que estabas equivocada.

-         Vale, lo estaba. –Le di la razón, como siempre.

-         Todavía no me has dicho por qué decías que era mal chico. –Otra vez no por favor.

-         Te dije que es lo que me trasmitió. –Repetí aburrida.

-         Te dije que no me lo creía y sigo sin hacerlo. –Me miró con esa cara que siempre me sacaba la verdad.

-         Esta bien, tuvimos un par de choques y acabamos discutiendo.

-         ¿Cuándo? –Estaba interesado.

-         Hará unos días. –Contesté.

-         ¿Y en un par de horas has cambiado de opinión sobre él? –Me preguntó sorprendido

-         Bueno, hemos hablado y no es como yo pensaba. –Estaba tranquila y no tenía por que no, estaba diciendo la verdad.

-         ¿Te ha hablado sobre su vida antes de venir aquí?

-         Ah, ¿pero que no es de Londres? –Eso no me lo había contado.

-         ¿Pero de qué habéis estado hablando? –Se rió un poco.- Lleva aquí un año, pero nadie sabe por que se mudo ni nada sobre su vida, es de Bradford.

-         Bueno, tendrá sus razones. –No le iba a decir lo que me había contado.

Estuvimos un buen rato hablando. Llegué a mi casa, mi padre estaba sentado esperándome como siempre.

-         Hola cariño. –Me dijo quitándose las gafas de leer y desprendiendo una sonrisa.

-         Hola. –Me acerqué a darle un beso.

-         ¿Has venido con tu primo no? –Estaba pesado con eso de que no volviese cuando era de noche sola.

-         Sí papá –Dije con voz aburrida. Se rió un poco.

-         Ha llamado antes tu hermano. –Eso provocó una gran sonrisa en mi cara.- Dijo que llamaría otra vez en un par de días para hablar contigo.

-         ¿Has hablado con el? ¿Qué tal está? ¿Qué te ha contado? –Estaba emocionada, hacía al menos tres semanas que solo me comunicaba con el a través de Facebook al igual que con la otra gente de España.

Estuvimos hablando un buen rato y me fui a la cama agotada por ese largo día.

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Gracias por leerlo cielos!! :3

Poco a poco espero que se vaya poniendo más interesante y os enganche más! Espero que os haya gustado. Os quiero cariños!! <3