Cuando llegué al instituto me encontré como siempre a Harry
en el pasillo de las taquillas.
-
Buenos días princesa! –Dijo en tono cómico.- ¿Preparada
para una nueva semana en el infierno?
Le sonreí a modo de saludo mientras cogía mis libros.
-
Vaya, veo que hoy no estas muy habladora ¿eh? –Agarró
un par de mis libros y empezamos a caminar hacia clase.- ¿Sabes que día es hoy?
-
Sorpréndeme. –Dije intentando poner el todo más
emocionado posible. Me mato con la mirada y dijo:
-
Hoy, quedan una semana exacta para tu cumpleaños. –Dijo
emocionado.
-
Vale, o sea que va ha ser mi primera fiesta aquí ¿no?
–Dije riendo por su emoción.
-
Muy bien, acertaste de pleno. Entonces, solo he de
decirte que aquí si hay una fiesta hay que pasarlo muy muy bien, por eso no
quiero caras tristes ni silencios ¿vale? –Se puso enfrente cortándome el paso y
esperando una respuesta. Le sonreí a modo de respuesta.
-
Genial. –Dijo.- Entonces la fiesta será el sábado.
-
Pero… este sábado lo celebraré con la familia, mi padre
ya está montando todo. –Dije con bastante desgana.
-
Pues el próximo. –Dijo con la misma sonrisa y aún más
emocionado.- Así habrá más tiempo para montarlo todo. –Se rió y yo también un
poco.
Seguimos nuestro camino a clase y durante toda la clase me
estuvo hablando de que tenían pensado hacer en la fiesta, la verdad yo estaba
algo emocionada ya que era mi primera fiesta aquí así que participé en la
conversación y le di un par de ideas.
En el recreo, hoy solo estábamos fuera Liam, Louis, Harry,
Sam y yo. Volvió a salir el tema del tal Zayn. Yo me mantuve al margen hasta
que Louis me agarró de repente y me dijo.
-
____ mira, es ese chico!! –Hablo bastante alto y encima
señalando. Le miré mal.
-
No grites. –Le dije bajándole el brazo.
Miré hacia la dirección que el había indicado y vi a dos
chicos, esta imagen era rara, muy rara. Acababa de ver a Niall y el chico de la
moto hablando juntos!
Si eran dos y a Niall ya le conocía… Zayn era el chico de la
moto!
Me quedé sorprendida, pero intenté disimularlo.
-
Sí, ya se quién es porque ayer conocí al otro chico.
–Dije
Yo estaba a cuadros, Zayn, el chico del que hablaban era el
chico de la moto. Ese estúpido que me había sacado de los nervios. Pero no
quería que ellos notaran nada.
-
¿Conoces al chico rubio? –Me dijo Liam.
-
Sí, ayer estaba dando una vuelta y su perro se abalanzó
sobre mí. Es nuevo y parece muy simpático, le dije que hoy os presentaría pero
no le había visto en todo el día… hasta ahora. –Les expliqué.
-
Nosotros le hemos conocido hoy en clase, aunque no nos
hemos acercado a hablar ni nada. –Dijo Liam.
-
Bueno primita, y respecto a Zayn ¿qué te parece a
primera vista? –Me preguntó interesado Louis.
-
Pues no me había fijado, pero parece bastante
prepotente y no muy simpático. –Dije, aunque ellos no sabían que no era a
primera vista y la verdad no me hacía mucha ilusión que lo supiesen así que no
lo comenté.
-
Otra más. –Dijo Sam en tono de decepción. Liam me miró
extrañado.
Durante todo el resto del día no volví a ver a Zayn, pero a
Niall sí le vi durante un rato y estuvimos hablando. Niall me contó que había
conocido a Zayn en clase y que a él le había caído muy bien que parecía buen
chico solo que era bastante cerrado. También me contó que había hablado un poco
con mis primos pero a penas ya que estaba atento para recuperar las clases
perdidas por la mudanza. Decidimos que lo mejor sería quedar esa tarde todos en
el mismo lugar del día anterior, así podríamos tener más tiempo para hablar,
conocernos un poco más.
Respecto a lo de Harry, estuvimos igual que siempre. De vez
en cuando Lou me miraba de forma pícara y me sonreía, yo simplemente le quitaba
la mirada. No sé que pasaba pero yo estaba igual de bien con el que de
costumbre, sin ningún cambio así que decidí no darle importancia, al fin y al
cabo Harry era mi mejor amigo.
A la vuelta a casa cuando Liam y yo nos quedábamos solos
sacó el tema. Sabía que iba a empezar una de nuestras guerras de indirectas.
Uno de los dos las mandaba sabiendo que el otro las entendía hasta que
consiguiera sacar algo de información.
-
He hablado con Louis. –Lo dejó caer. Ignoré por donde
intentaba ir.
-
¿Sobre qué?
-
Me ha dicho que Harry y el están pensando en darte una
fiesta el sábado y Harry está muy emocionado. –Lo intentó.
-
Sí, me lo dijo esta mañana, la verdad creo que me
vendrá bien desconectar un poco. –Dije cambiando el camino de su conversación.
Suspiró.
-
Dice que quiere que sea algo especial, que no lo
olvides fácilmente. –Volvió a intentarlo. No le iba a dejar que me ganara.
-
Entonces no debería beber demasiado. –Comencé a reír.
Sonrió, sabía que iba por delante de él.
-
Hemos pensado que sea en mi casa o en la de Harry ya
que son las más grandes, ¿tú que prefieres? –Espera, ¿había abandonado ya?
-
No sé a mí me da igual, en tu casa me dejarán quedarme
a dormir y no me tendréis que acompañar a casa.
-
Bueno pero la casa de Harry es más bonita y además
seguro que alguno se ofrecería a acompañarte. –Volvió a la carga.
-
Discrepo sobre lo de que es más bonita. –Dije mientras
me adelantaba para abrir la puerta. Ya estábamos en mi casa, Liam se iba a
quedar a comer y de paso me ayudaría con unos deberes.
-
¿Qué tal chicos? –Dijo mi padre en cuanto entramos por
la puerta.- _____ cariño yo me tengo que ir a trabajar pero os he dejado un
poco de pasta en el horno ¿vale? –Me dijo dándome un beso en la frente. Dio un
apretón de manos a Liam y se fue.
-
Pasta… -Murmuré. Liam se rió. No me gustaba demasiado
así que me preparé un sándwich mientras seguíamos hablando, pero ya él se había
echado atrás en el tema de Harry y eso me hizo sonreír. Liam me miro de forma
extraña y me dijo:
-
¿Sabes? Antes me has decepcionado. –Me quedé en blanco.-
Por lo de Zayn.
-
Ammmm… -Di un mordisco al bocadillo, no quería decir
nada.
-
¿Por qué dijiste eso sobre él?
-
Es lo que me ha parecido al verle. –Dije secamente. Él
lo notó.
-
No me lo creo.
-
Liam es mi opinión. –Me puse a la defensiva y otra vez
lo notó.
Sonrió levemente y me miro fijamente a los ojos. Odiaba que
hiciese eso, normalmente no me suelo poner nerviosa cuando miento sobre
pequeñas cosas como esta, pero Liam me conoce demasiado y parece que tiene un
radar conmigo.
-
¿Ves? –Sólo dijo eso y siguió comiendo.
-
¿Qué? ¿Qué pasa que tengo que pensar siempre como tú?
–Volví a ponerme a la defensiva, aún más notablemente que antes.
-
Espera, tú le conoces. –Me dijo dándose cuenta y
aclarando su mente.
-
No es cierto. –Respondí intentando parecer lo más
creíble posible.
-
Si lo es. Tú eres como yo, no juzgas a las personas sin
conocerlas, es más me atrevo a decir que si no le conocieras antes hubieses
contestado con un “No puedo opinar porque no le conozco” o algo así. –Dijo ya
dejando zanjada la cuestión. Me molestó que lo hiciese.- ¿Y como os
conocisteis? No, mejor ¿por qué dices que no le conoces?
Me quedé pensativa, cierto, ¿por qué no quería que supieses
que me encontré un par de veces con él? Bueno este no era el momento de ponerse
a descifrarlo.
-
Otra vez, que no le conozco Liam. –Dije ya un poco
alterada. Se rió. Me ponía de los nervios cuando hacía eso.
-
Bueno, entonces explícame tus razones para decir que es
prepotente y antipático.
¡Salvada por la campana! Alguien llamaba a la puerta.
-
Voy a abrir. –Dije saltando del sofá bastante aliviada.
Liam suspiró fuertemente, sabía que me había escapado de responderle.
Era mi tío, o sea el padre de Liam. No quería nada
importante, solo unas herramientas de mi padre para arreglar no se qué del
jardín. Intenté alargar la conversación con el lo más que pude pero pronto se
fue diciendo:
-
Oye, ¿no venías a ayudarla con los deberes? Pues no sé
a qué esperáis si pensáis salir después –“Gracias tito” pensé para mí. Así no
me molestaría más con el tema de Harry ni el de Zayn.
Me ha gustado mucho!! mañana otro capitulo no? se me hacen tan cortos!!! :)
ResponderEliminar