More Than This 1.24

-         ¿Qué te parece mi hermana? –preguntó mientras cerraba la puerta a mi paso. Yo no pude evitar recordar la pequeña conversación y sonreír.

-         Es muy simpática –dije, le gustó.

En el jardín había una zona con suelo de piedra pegada a la casa y lo demás estaba cubierto de césped.

En la zona de piedra había un pequeño banco también de piedra donde Zayn me guió para sentarnos.

-         ¿Era tu padre? –pregunté refiriéndome a sobre con quién había estado hablando por teléfono.

-         Sí, este fin de semana no ha podido venir y me estaba preguntando que qué tal nos ha ido –Asentí con la cabeza- Antes estuve hablando con Liam.

-         ¿Sobre qué?

-         Sobre ti.

-         ¿Sobre mi? –dije un poco asombrada.

-         Bueno, en realidad me preguntó sobre mis intenciones contigo –me reí, típico de Liam.

-         ¿Y qué le dijiste?

-         Que quiero estar contigo –me quedé callada, no entendí bien a lo que se refería- ya sabes, me gusta pasar tiempo contigo.

Claro, a eso se refería. Me decepcionó un poco la respuesta, creí que quería decir algo más de eso pero no quise que lo notase y sonreí.

Me agarró de los brazos para sentarme sobre él y yo puse mis manos apoyadas en sus hombros para darle un beso, un corto beso.

-         Has fumado –dije seria. Bajó la mirada.- No deberías hacerlo.

-         Lo sé –dijo un poco avergonzado.

-         ¿Tus padres lo saben?

-         No que yo sepa –dijo ahora mirándome.

-         Intenta dejarlo, te haces daño –dije apoyando mis manos en su cara para mirarle mejor a los ojos.

Asintió con una pequeña sonrisa y volví a besarle.

Podía sentir un leve sabor a tabaco pero con cada beso que le daba mi boca se acostumbraba cada vez más.

Giraba mi cuerpo todo lo que podía para quedar más cerca de él. Los besos se alargaban y su lengua no paraba de recorrer cada centímetro de mi boca acelerando mi pulso.

Escuchamos como la puerta de la terraza de abría y paramos en seco.

-         ¿Zayn puede venir una amiga a casa? –preguntó desde la puerta.

Aclaró su garganta.

-         Claro.

-         ¡Mary pasa! –Gritó entrando en la casa otra vez.

Yo me empecé a reír y Zayn me levantó cuidadosamente para ir hacia la puerta.

Estaba la madre de Mary en la entrada. Zayn y ella intercambiaron unas cuantas palabras y ella se fue.

Las dos niñas se quedaron en el salón y pusieron una película.

-         ¿Vamos arriba? –me dijo Zayn agarrando mi mano.

Asentí y me dirigió hasta su cuarto. Era de tamaño normal, las paredes blancas con algunos cuadros familiares y casi todas ocupadas por algunos logos y demás. Un gran escritorio ocupaba la mayor parte, también un pequeño mueble encima de una gran ventana con un par de cojines sobre él, seguramente lo utilizaría como asiento, y una cama no muy grande a un lado del cuarto.

Me senté en el mueble al lado de la ventana mirando mi móvil mientras Zayn volvía del baño.

*Un nuevo mensaje*

Iba a abrirlo pero noté que alguien me miraba, levanté la vista y ahí estaba Zayn apoyado en la puerta del cuarto mirándome con una sonrisa en la cara.

-         ¿Qué? –dije.

Sonrió agarró la silla del escritorio y se sentó en ella justo en frente mía. Se quedó quieto sin decir ni hacer nada, sólo me miraba.

-         Zayn ¿qué haces? –dije.- Me estas poniendo nerviosa, ¡para!

Se rió y se acercó más a mí ahora dándome un pequeño beso.

Su boca sabía a menta. Sonreí.

-         ¿Te has ido a lavar los dientes?

-         No quiero que te desagraden mis besos por el tabaco –dijo acercándose para darme otro pequeño beso.

No pude evitar sonreír a pesar de que sus labios presionaban los míos.

-         Te he mentido –dijo de repente separándose de mí con una expresión seria. Hice una mueca, no sabía de qué hablaba- no puedo ocultarlo aunque no sé si a ti te gustará.

-         ¿De qué hablas? –dije.

-         Quiero estar contigo, no simplemente porque me siento a gusto si no porque siento más por ti de lo que nunca pensé que iba a sentir en tan poco tiempo.

Mi corazón empezó a bombear más rápido.

-         Zayn yo… -me cortó.

-         Espera, déjame continuar –asentí- Sé que para ti es difícil por lo que me has contado pero me gustaría que pensases la idea de que nosotros, ya sabes, lo intentemos. –Soltó con miedo esas últimas palabras.

La verdad es que yo no sabía muy bien como responder a eso y mi cara debería ser todo un poema entre sorpresa y confusión, ¿le besaba? ¿simplemente le decía que sí? ¿o le decía todo lo que yo sentía por él? Claro que iba a aceptar, pero no sabía como.

-         Me estás asustando, di algo por favor –dijo. Yo sonreí y su mirada se iluminó.

-         Zayn, claro que quiero intentarlo –solté por fin y apareció una preciosa sonrisa en su cara que me contagió.

-         ¿Sí? –dijo agarrando sus manos a las mías sin dejar de mostrarme esa sonrisa.

-         Sí –dije ahora yo lanzándome a sus labios.

Sus manos seguían agarradas a las mías mientras se levantaba haciendo que yo le imitase. Puso sus manos sobre mi cintura haciendo presión contra él.

Su lengua jugaba con la mía. Llevé una de mis manos que tenía en su cuello hacia arriba, revolviendo un poco su pelo.

Nos separamos un segundo ya que estábamos sin aire para pronto volver a unir nuestras bocas.

Sus manos recorrían toda mi espalda levantando, cada vez que subían, un poco mi camiseta a la vez que hacían presión entre nuestros cuerpos a pesar de que no pudiesen juntarse más.

Hizo amago de terminar nuestros besos realentizandolos un poco y separando su boca de la mía pero mordí su labio inferior suavemente señalándole que no quería que lo hiciese.

Zayn bajó de repente sus manos hacia mis muslos para elevarme y poner mis piernas alrededor de su cintura. Yo me agarré fuertemente a su cuello mientras seguíamos con los besos, recorriendo todas nuestras bocas con las lenguas.

Sin parar, se dirigió a su cama y se sentó. Yo estaba con las rodillas apoyadas en la cama aún encima suya.

Sentía calor y nuestras respiraciones eran agitadas. Bajé la cremallera de mi chaqueta de chándal y me la quité quedando en una simple camiseta de tirantes negra.

Zayn bajó a mi cuello lentamente, dándome pequeños besos para luego pellizcar con sus dientes a la vez que continuaba con los besos. Solté un par de suspiros que hacían que él se acelerase más. Yo no paraba de pasar mi mano por su nuca agarrando de vez en cuando algunos mechones de pelo.

Volvió a mi boca para continuar cada vez con besos más intensos mientras sus manos no paraban de recorrer ya no solo mi espalda si no todo mi cuerpo.

Me aparté de su boca dirigiéndome ahora a su oreja para morder con cuidado y entre besos su lóbulo haciendo que soltase un pequeño gemido que aumentó mi calentura.

Agarró mi cintura para darme la vuelta dejándome tumbada boca arriba y poniéndose él encima mía aprisionando mi cuerpo con el suyo pero sin llegar a dejar todo su peso sobre mí.

Volví a agarrarle de su cuello para acercarle hacia mí y seguir besándole. No pensaba en nada más que en él y en mí. Mi mente estaba centrada en eso.

Zayn fue otra vez hacia mi cuello haciendo esta vez que yo soltase un par no solo de suspiros si no también gemidos. Bajaba más, por la parte inferior de mi cuello y yo se lo permitía, mi mano acariciaba su pelo y la suya entraba despacio por mi camiseta, subiéndola un poco hasta llegar a mi tripa donde paró y la dirigió a mi espalda. Volvió a mi boca y después de un par de besos se incorporó un poco para con mi ayuda quitar su camiseta.

Era tan perfecto, sus abdominales, sus pectorales, todo me estaba volviendo loca.

No me pude resistir a ir hacia su cuello pero pronto giró su cabeza buscando otra vez mi boca.

Sus ojos se clavaban en los míos lo que duro un par de segundos antes de que nuestras bocas se uniesen otra vez. Pero rápidamente paró, ahora separándose un poco de mí y acabando sentado en la cama. Me incorporé con cara extrañada.

-         ¿Qué pasa? –dije juguetona acercándome otra vez a besarle el cuello.

-         _____, esto va muy rápido y tú, no sé sí tú… –se calló. Me separé un poco.

-         Soy virgen si es a lo que te refieres –dije tranquila.

-         Exacto, y no quiero que tu primera vez sea así.

-         ¿Así como? –pregunté extrañada.

-         Acabamos de empezar a salir, tenemos mucho tiempo.

Suspiré y me dejé caer boca arriba sobre la cama. Él se rió un poco y se acercó a darme un pequeño beso en la boca. 

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Amores aquí tenéis el nuevo capi, espero que os haya gustado :$

Ya he terminado los exámenes así que os los subiré más rápido y posiblemente empiece pronto con la nueva novela, ya lo dije, si vais a quererla decídmelo por twitter ¿vale? :) 

Y como siempre, ¡críticas por dios que si no no mejoro! Si os da cosa decirmelas podéis dejarlas en un ask anónimo o algo :3

Un beso cielos <33