lunes, 9 de julio de 2012

More Than This 2.24


Saboreé su boca al completo, su lengua jugaba con la mía deseosa.

Su mano subió hasta uno de mis pechos acariciándolo y sus besos se desviaron de mi boca para bajar calientes por mi cuello. Segundos después sus labios se posicionaron sobre mi pecho haciendo que mi excitación aumentase más aún. Después pasó a mi otro pecho mientras su mano separaba con cuidado mis piernas para acariciarme.

Apoyé mi mano en su cabeza para indicarle que me besase en la boca. Levantó la mirada para encontrarla con la mía y presionó sus labios con los míos.

Volví a encontrar su lengua entre mis jadeos. Sentí como una pequeña oleada de placer recorría mi cuerpo y un gemido salió de mi garganta parando directo en su boca. Una breve sonrisa apareció en sus labios aún sobre los míos.

Se separó un segundo para deshacerse de las dos prendas que nos sobraban y abrió el cajón de la mesilla sacando una caja de preservativos.

-          ¿Cómo es que tu casa estaba sola hoy? –pregunté agitada.

-          Mi madre y hermana fueron con la familia de aquí.

-          ¿Desde cuándo lo sabías? –pregunté mientras él se colocaba un preservativo.

-          Esta tarde –contestó volviendo a tumbarse sobre mí.

Juntó otra vez nuestros labios dejándome saborear su boca con casi desesperación.

-          Pensé que lo habrías organizado –dije simulando decepción. Me miró a los ojos.

-          No sabes las ganas que tenía de volver a estar contigo así, juntos, sin nada que nos moleste, solos tú y yo.

Sonreí y acaricié su mejilla para después juntar nuestros labios en un dulce y suave beso que poco a poco se convirtió en uno lleno de deseo y pasión.

Separó un poco más mis piernas con sus manos para introducirse en mí despacio. La velocidad de sus besos disminuyó mientras esperaba a que mi cuerpo se acostumbrase y así no hacerme daño.

Abracé con mis piernas su cintura sintiéndole más profundo mientras un suspiro escapaba de mis labios. Él comenzó a mover sus caderas dentro de mí con lentitud.

-          Zayn… -gemí sobre sus labios sintiendo como poco a poco me llevaba al clímax. Él mordisqueó mis labios suavemente.

Sentía como cada segundo que pasaba el alcohol desaparecía de mí por completo y eso me gustaba, recordaría esto mucho mejor, con más claridad, con más exactitud.

Sus labios se encontraban a milímetros de los míos y su respiración agitada se enredaba con la mía. Él comenzó a aumentar el ritmo y yo no pude retener un gemido. Bajó a besar mi cuello pellizcando mi piel en su camino.

Después de unos minutos de inmenso placer Zayn estiró su brazo por encima de mi cabeza y se agarró a la cama para aumentar la fuerza de sus embestidas. Su nombre salió de mi boca cuando me corrí y su velocidad se calmó entonces.

Bajó su mirada a mí y besó mis labios con ternura. Yo los recibí acariciando su cara.

Respiraba trabajosamente aún cuando él volvió a acelerar el ritmo buscando su fin. Cuando llegó a éste descansó sobre mí mientras yo acariciaba su espalda con mis manos.

-          Te quiero –susurró en mi oído. Sonreí para besar su oreja, luego su mejilla y tras varios besos llegar a su boca. Le besé cortamente.

-          Te quiero –le dije. Miró a mis ojos y le volví a besar.


El pequeño golpeteo de algo en lo que parecía ser un cristal hizo que abriese mis ojos algo molesta. Miré a la procedencia del sonido y se debía al choque de pequeñas bolas de hielo contra la ventana de la habitación, que por cierto, no era la mía. Giré mi cabeza buscándole para encontrarme con su fija mirada en mí y una leve sonrisa dibujada en su cara.

-          ¿Qué tal has dormido preciosa? –preguntó acercándose a mi boca para depositar un suave beso en mis labios.

-          ¿Qué hacías? –pregunté divertida.

-          Mirarte –dijo acariciando su nariz sobre la mía. Sonreí y alcé mis brazos estirados por detrás de su cabeza. Volví a besarle.

-          ¿Qué hora es? –pregunté. No podía guiarme por la luz del sol ya que no había. Hubiese dicho que eran las nueve de la tarde pero por supuesto, no era esa hora.

-          Las cuatro y media, debes tener hambre, voy a bajar a preparar algo –dijo alejándose un poco pero mis brazos se lo impidieron junto a un pequeño quejido que salió de mi garganta.

-          No hace falta –dije para besarle y él sonrió volviéndose a tumbar en la cama y abrazando mi cintura.- ¿A qué hora vienen tu madre y hermana?

-          Tarde, no te preocupes –contestó para besar mis labios ahora él.

Después de una media hora jugando con él entre las sábanas decidió bajar a preparar algo mientras yo me duchaba y vestía. Me dejó unos pantalones suyos de chándal bastante anchos y una camiseta que le quedaba pequeña. Me reí al verme en el espejo del baño y bajé a la cocina.

-          Espero que me estés preparando sushi –dije muy seria sentándome en la encimera  de la cocina.

-          ¿Sushi? No sé hacer sushi –dijo dirigiendo su vista a los sándwiches que había hecho. Me reí y le acerqué hacia mí situándole entre mis piernas.

-          Mejor, odio el pescado crudo –susurré en sus labios.

-          Aprendería a hacerlo si te gustase –dijo y no pude evitar sonreír mientras juntaba sus labios con los míos.- ¿Sabes? Con esa ropa están tan… -me separé de él y le pegué en el hombro para después reírme.

-          Me queda perfecta no mientas –le dije y se rió.

-          Eso es lo que iba a decir, no me dejas terminar las frases –contestó atrayéndome hacia él.

-          Quita –le separé de mí. Me miró expectante.- Tengo hambre –le dije bajando de la encimera.

Nos sentamos en el sillón de la sala de estar para comer algo mientras veíamos la televisión un rato.

Se me hizo tarde y regresé a casa. Después de unas cuantas preguntas de mi padre acerca de que había vuelto muy tarde y de que la ropa que llevaba era de chico a lo que le expliqué que nos quedamos en casa de Harry todos y no tenía nada más, subí a mi habitación.

-          _____, Angela al teléfono –dijo mi padre abriendo la puerta de mi cuarto.

-          Vale, gracias papi –dijo un par de cosas a Angela antes de pasármela. Por alguna razón extraña se llevaba genial con ella, confiaba más en ella que en mí aunque eso me daba ventaja a la hora de nuestras salidas.

-          ¿An?

-          ¡Hola amiga! –dijo emocionada al otro lado del aparato.

-          ¿Qué pasa?

-          ¿Cómo que qué pasa? –esperé a que se explicase.- Mañana tenemos que quedar para comprar y ver que nos vamos a llevar por supuesto, ya que hoy la señorita ha estado muy ocupada haciendo cosas de las que necesito detalles urgentemente con su novio. –Me reí.

-          Tú nunca me das detalles –la reproché.

-          ¿Quieres detalles sobre mi vida sexual con tu primo?

-          ¡NO! –chillé a través del teléfono.

-          Pues eso –se rió. Suspiré.

-          ¿Y para qué tenemos que ir de comprar y qué hay que preparar?

-          ¿Hola? Cariño, pasado mañana nos vamos a Irlanda, vas a estar ocho noches seguidas con Zayn, ¿me estás diciendo que tienes ropa interior preciosa y sexy para esas ocho noches?

-          Por dios Angela –la dije poniendo mis ojos en blanco. Había olvidado totalmente que iríamos a Irlanda en tan poco tiempo.- Dios, aún no he hablado con mi padre sobre ello.

-          ¿Sobre tu ropa interior?

-          Sobre que me voy a Irlanda más de una semana con mi novio y mis amigos dementes, y por supuesto que los padres de Niall no estarán.

-          ¡Ah! Eso ya lo he hablado yo con él –casi se me desencaja la boca.

-          Dice que no hay problema mientras que vuelvas sana y salva. Bueno, también le he dicho que yo dormiría en la misma habitación que tú y que ya que soy un año más mayor iba a cuidar de ti.

-          ¿No ha puesto pegas?

-          Bueno, me ha dicho que si te veo acercarte de más a Zayn o él a ti, que le de una bofetada, pero por lo demás todo bien.

-          Genial, mi padre es idiota –dije.

-          Bueno, mañana a las nueve y media me paso por tu casa y vamos de compras.

-          ¿A las nueve y media de la mañana?

-          No cielo, mañana voy a pedir que nos abran las tiendas por la noche para nosotras.

-          Ya son dos idiotas con los que hablo –dije y ella se rió.

-          Recuerda, a las nueve y media, ¡no te duermas! –dijo y me colgó. Solté un suspiró y me dejé caer sobre la cama.


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Espero que os haya gustado preciosas <3

7 comentarios:

  1. 1. El principio del capítulo hasta mas o menos la mitad...MUY MUY excitante 2. Lo de los viajes eso no se puede olvidar eh.. xD 3. Me río un montón con Angela y __ son ajnkafla igual que tú Xx

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  2. aaaaa!!!!!!!! madre mía nunca habia visto tanta perfección junta en un capítulo, siguiente!!!!! :) XD

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  3. Me gustaria que hubieses visto mi cara leyendo.. No puedo esperar a leer lo que pasara en Irlanda. Todo es perfecto <3 @InesZiam1D

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  4. Pero pero, y este capitulo tan perfecto?! *__* madre mía, quiero saber que pasa en Irlanda, espero que Harry no se menta entre Zayn y ____. Y Angela y ____ son muy jskjthri :)siguiente ya cielo :) (@alca97)

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  5. Me ha encantadoo! Mucho, mucho, muchooo! Tieenes que continuar yaa! ^^ te puedes pasar por mi nuevo blog? Es una nove de 1D? XX http://novelade1dmorethanthis.blogspot.com.es/

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  6. Cielo solo puedo decir que tu novela es demasiado perfecta. Me haces sentir que todo es tan real... tienes un don. No se ni que decir ya, todo me parece poco. Lo unico es que estoy deseando saber que pasa en Irlanda! Te quiero cielo! <3 xx

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  7. Coincido con el comentario de arriba, escribís muy bien!,
    Increíble como siempre el cap. Quiero que las cosas vuelvan a la normalidad con Hazza :( jajajajaja,
    Beeso genia =)

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